En este blog podrás encontrar todo sobre la educación sin barreras, es decir, la educación para todos sin tener en cuenta la edad, el sexo, las capacidades o discapacidades que tengas, pues es derecho de todos tener una buena educación.

El canto del loco

sábado, 27 de marzo de 2010

La realidad de la inclusión

La inclusión se debe dar en todas las escuelas, a excepción de las privadas que tendrán el derecho de elegir si llevan a cabo la inclusión o no. Pero ¿Esta forma de educación se lleva a cabo en todos los centros? Solamente tenemos que leer la siguiente carta de ayuda que mandan unos padres para darnos cuenta de lo que ocurre en realidad.


¿Qué estamos pidiendo? Algo simple: Que se le asigne a Arturo personal de apoyo educativo dentro de su aula ordinaria, para que pueda ejercer su derecho a la educación como el resto de sus compañeros.
Como comprenderéis, no me conformo con palmaditas en la espalda, Arturo tiene derecho a SOLUCIONES.
Y tiene derecho a SOLUCIONES, no para mañana, ni para cuando tenga tiempo de recibirme un cargo recién nombrado...
Llevo registrando escritos desde el pasado 16 de abril, y no han tenido a bien ni contestar el primero.
No estoy mendigando nada. Estoy exigiendo que se cumplan los derechos de mi hijo.Estamos poniendo encima de la mesa TODO.
Y digo TODO porque estamos dando a la administración educativa todas las posibilidades para solventar que Arturo disponga de los medios que necesita.
Admitimos que se discrimine a nuestro hijo por tener diversidad funcional, y por haber elegido nosotros, sus padres, escolarizarlo en un centro concertado: si la solución es cambiarle de colegio, le cambiamos.
Garanticen ustedes que en ese centro van a existir recursos, en la medida que los necesite Arturo.
Garantícelo antes de hacer el cambio. Algo lógico ¿no?. No nos gustan los experimentos.
Es obligación de la Administración dotar de recursos tanto a los colegios concertados como a los colegios públicos.
No nos importa, queremos que Arturo se quede en su colegio, dónde está feliz, pero cambiamos a Arturo de centro si es necesario (arriesgando TODO lo conseguido hasta ahora).

¿ Qué recibimos a cambio? Palmaditas en la espalda. Arturo tiene derechos, como todos los niños, y es el deber de la Administración respetarlos y poner los medios para que Arturo los ejerza.
Mi hijo ¡¡¡EXISTE!!!, y no voy a parar hasta que les quede claro que tiene derecho a algo más que a estar recogido en un colegio. Llegados a este punto.


Es verdad que llevar acabo la inclusión es una tarea muy costosa pero que se tiene que dar les guste o no a los centros ya que así lo dispone la ley, por lo que creo que se tendría que tener muy en cuenta las peticiones de los padres y no poner escusas para no dar el apoyo necesario a alguien que aunque le gusta donde está y como trabaja, necesita a alguien más que le guíe en su aprendizaje para un mejor desarrollo de sus capacidades.

¿Qué penáis vosotros?

No hay comentarios:

Publicar un comentario